Descubre «El Águila y el Escarabajo», una fábula de Samaniego que nos enseña sobre el poder del respeto y la humildad. Esta historia nos recuerda que no debemos subestimar a nadie, sin importar su apariencia o tamaño.
En un bosque, un águila capturó a una liebre. La pobre liebre, aterrorizada, clamaba por ayuda.
- ¡Ayuda! ¡Que me matan! Gritaba la liebre, atrapada en las garras del águila.
Un escarabajo, al escuchar los gritos, se acercó y vio la escena.
- ¡Oh, águila poderosa! ¿Por qué le quitas la vida a este animal tan manso y cobarde? ¿No sería mejor cazar a animales dañinos? Le preguntó el escarabajo.
El águila, despreciando al escarabajo, simplemente mató a la liebre y se fue. El escarabajo, sintiéndose humillado y con ganas de venganza, decidió actuar.
- No dejaré que esto quede así, pensó el escarabajo.
Fue al nido del águila y, uno por uno, tiró todos los huevos que encontró. Y cada vez que el águila ponía más huevos, el escarabajo los destruía.
Desesperada, el águila fue a pedir ayuda a Júpiter, quien le permitió poner sus huevos en su regazo para protegerlos. Pero el escarabajo, astuto y decidido, no se dio por vencido.
Fabricó una bola de un material desagradable y la colocó en el regazo de Júpiter. Al sentir la suciedad, Júpiter se sacudió, destruyendo los huevos del águila.
El águila, triste y arrepentida, aprendió una valiosa lección:
- Nunca se debe despreciar a nadie, ni siquiera a un escarabajo. Porque incluso el más pequeño y humilde puede tomar venganza si se siente ofendido.
Moraleja de «El Águila y el Escarabajo»:
La moraleja de «El Águila y el Escarabajo» es una lección poderosa sobre el respeto y la humildad. Nos enseña que nunca debemos subestimar a nadie, independientemente de su tamaño o apariencia.
Cada ser, por pequeño o humilde que sea, tiene su valor y dignidad. El águila, al despreciar al escarabajo, aprendió de manera dura que las acciones despectivas pueden tener consecuencias graves e inesperadas. Esta fábula nos recuerda la importancia de tratar a todos los seres con respeto y consideración.
Preguntas:
- ¿Por qué es importante tratar a todos los seres con respeto, como nos enseña la fábula?
- ¿Cómo puede afectar a los demás el despreciar o subestimar a alguien?
- ¿Qué lección aprendió el águila y cómo puedes aplicarla en tu vida?
- ¿Has subestimado alguna vez a alguien por su apariencia o tamaño? ¿Cómo crees que se sintió esa persona?
- ¿Qué crees que podrías hacer para asegurarte de tratar a todos con igual respeto y consideración?
Conclusión:
«El Águila y el Escarabajo» de Samaniego es una fábula que resalta la importancia del respeto y la humildad en nuestras interacciones. Nos enseña que todos los seres, sin importar su tamaño o estatus, merecen respeto y consideración. Esta historia nos invita a reflexionar sobre cómo nuestras acciones y actitudes pueden impactar a los demás, y cómo el respeto mutuo es esencial para una convivencia armoniosa.